La transformación digital ha cambiado nuestras vidas y ha afectado a los distintos sectores profesionales del país. Es evidente que la digitalización ha favorecido a las empresas y ofrece un mayor número de oportunidades, así como la posibilidad de ser más competitivos en el mercado.

Por su parte, la implementación de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) ha facilitado la comunicación y relación entre los empleados. Estos han podido agilizar las gestiones y sus tareas administrativas gracias a Internet. Incluso la modalidad del teletrabajo cada vez adquiere más protagonismo y permite reducir los costes laborales.

Según el estudio «España 4.0, el reto de la transformación digital de la economía» de Roland Berger, los distintos sectores de la economía se han tenido que adaptar a un nuevo contexto y a las exigencias del consumidor digital.

 

implantación de las tic en las empresas de España

 

Las TIC y la importancia de la transformación digital en las empresas

Hoy en día, Internet forma parte de nuestras vidas. Es casi imposible imaginarnos realizar una operación que no sea online. Sin embargo, esta transformación no es algo nuevo, más bien, se caracteriza por la adaptación de las economías a lo largo del tiempo.

Las nuevas tecnologías han propiciado que muchas empresas puedan sobrevivir, sobre todo, en aquellos momentos en los que las crisis económicas han generado verdaderos estragos. Por ejemplo, a raíz de la pandemia de la COVID- 19, las pymes se han dado cuenta de la importancia del e-commerce. Las restricciones y las limitaciones han dado lugar a que muchas hayan decidido implementar nuevas mejoras tecnológicas.

La transformación digital en los diferentes sectores

Actualmente, hay sectores que encabezan el proceso de transformación digital como son los servicios financieros, el turismo, las telecomunicaciones y el transporte.

Le siguen muy de cerca la distribución, hostelería y restauración con un 12,7 %, siendo el retail uno de los sectores que experimentarán una de las mayores transformaciones los próximos años, tal y como ya ocurrió en los 40 últimos años.

Sin embargo, hay otras categorías, como la del comercio minorista, que también se enfrenta a importantes retos y desafíos. Cabe destacar, principalmente, la aplicación de las tecnologías en las tiendas físicas, la logística o la evolución del comercio online.

Muchos comercios pequeños y negocios relacionados con la restauración han invertido en portales de comercio electrónico para dar respuesta a la nueva demanda por parte del consumidor actual.

El e-commerce y el consumidor digital

Las ventas online crecieron un 65 % en España en el primer trimestre del pasado año. Esta cifra marcaba una tendencia al alza y ponía de manifiesto que el e-commerce y los canales digitales empezaban a ser una prioridad en el negocio.

El nuevo consumidor es digital y se caracteriza por ser una persona que tiende a informarse y leer opiniones antes de comprar. Por lo tanto, baraja todas las opciones posibles antes de adquirir un producto o servicio online.

La implantación de las TIC y las nuevas estrategias de comunicación

Para poder comprender la implantación de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) en las empresas españolas, debemos entender el cambio en la estrategia de comunicación. Sin embargo, hay que prestar atención a una serie de factores y características en función de si son pymes, microempresas o grandes empresas.

La integración de las TIC varía mucho en función a la magnitud y capacidad económica de estas. Hay diferentes niveles según las necesidades empresariales, ya que en algunos casos bastaría con un ordenador con conexión a Internet. En otras, por contra, este nivel es mucho más elevado y se aplican herramientas tecnológicas, servicios en la nube o análisis Big Data, entre otros aspectos.

Con todo, hay datos que ponen de manifiesto que las TIC no han penetrado lo suficiente en las empresas españolas. Las pymes y microempresas todavía tienen un largo camino por recorrer. La digitalización se ha convertido en una de las grandes preocupaciones para estas y, por tanto, se hace necesario que los empleados empiecen a formarse para ser más competitivos.

En nuestro país, aún queda mucho camino por recorrer. Según el “Índice de la Economía y la Sociedad Digitales”, un informe que elabora la Unión Europea, España ocupa el puesto catorce en el ranking de digitalización. De hecho, cuando hablamos de alta integración digital, únicamente un 7,4 % de las pymes con menos de 10 empleados usan los servicios Cloud Computing. En cuanto a formación se refiere, solo un 4 % se encarga de formar a sus empleados.

En este sentido, el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital del Gobierno de España aborda la transformación digital con iniciativas como la del programa Acelera Pyme. Asimismo, ha puesto en marcha una serie de ayudas con el programa Kit Digital para que los autónomos y pequeñas empresas puedan acceder a subvenciones para implementar soluciones digitales en sus negocios.

En definitiva, las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) han transformado el mundo laboral gracias a las nuevas oportunidades laborales y la globalización del mercado.